jueves, 15 de febrero de 2024

Pactos y promesas


Por Robert Newport

10 febrero 2024

Me indigna que Pedro Sánchez haya pactado con un personaje como Carles Puigdemont, para obtener los 7 votos que le permitieron ser investido presidente del Gobierno de España. Los pactos con el prófugo expresidente de la Generalidad, que incluyen la amnistía, supondrán una serie de concesiones para Cataluña, que pueden significar un agravio comparativo para otras comunidades autónomas. Porque el insaciable y arrogante Puigdemont, no dudará en incrementar sus exigencias.

Los pactos con Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, BNG, PNV y Coalición Canaria le van a causar más de un dolor de cabeza a Pedro Sánchez. Gestionar las peticiones de los que eligió como «compañeros de viaje», no va a resultar tarea fácil. Y no tengo ninguna duda de que el engreído Puigdemont será el más exigente.

El PP, por su parte, con un Alberto Núñez Feijoo cada vez menos moderado, más incisivo y pertinaz, no deja de caldear el ambiente, que ya está suficientemente crispado, haciendo una oposición de acoso y derribo, manifestándose en las calles como si no hubiera un mañana, haciendo suyo el grito de guerra de Manuel Fraga: ¡La calle es mía!

Los políticos tienen tendencia a prometer lo que, de antemano, saben que no van a cumplir. Pedro Sánchez: «Puigdemont será detenido, juzgado y condenado». «Con Bildu no vamos a pactar». Por su parte, Alberto Núñez Feijoo: «Yo nunca pactaré con Vox». Y ahora, donde dije digo, digo Diego. Ya lo dice el refrán: «Prometer hasta meter; y una vez metido, olvidar lo prometido».