jueves, 9 de diciembre de 2021

Navidad 2021








Estimados amigos:

A pesar de que la pandemia continúa limitando nuestro día a día, alterando nuestros hábitos y comportamientos, deseo fervientemente que estas Fiestas Navideñas podáis celebrarlas en apacible armonía. Y que el Año Nuevo 2022, os permita seguir disfrutando de la familia, de los amigos… Y de la vida.



jueves, 21 de octubre de 2021

La furia de Vulcano






















20 octubre 2021
Por Robert Newport

Después de 50 años, ha vuelto a rugir. De nuevo ha vuelto a vomitar materia candente, sepultando todo lo que encontraba a su paso en su incesante avance hacia el mar…

El pasado 19 de septiembre, a las 15:13 horas (hora insular), el suelo tembló, se oyó un rugido… Y entró en erupción el volcán de Cumbre Vieja de la isla canaria de La Palma, llevándose por delante casi dos mil edificaciones: viviendas unifamiliares, iglesia, fábricas, almacenes… También plantaciones y carreteras.

Las imágenes son sobrecogedoras. Las enormes lenguas de lava (coladas) —algunas de 6 metros de altura—, engullían las edificaciones, una tras otra, con voracidad pantagruélica, ante la mirada atónita de sus propietarios, que veían con impotencia como sus casas desaparecían.

Ha transcurrido un mes desde que el volcán Cumbre Vieja despertó de su letargo, sembrando destrucción y convirtiendo la isla en un infierno. Ahora, los topógrafos tendrán que hacer nuevas mediciones y levantar nuevos planos topográficos. Y los cartógrafos se verán obligados a realizar nuevas cartas geográficas. A partir de ahora, la isla de La Palma ya no será la misma.

Cuando la caldera aplaque su furia y la tierra deje de temblar, lo urgente, lo importante —en este caso los dos conceptos son complementarios—, será normalizar la situación de los propietarios que perdieron sus viviendas, industrias y plantaciones. Y habrá que reconstruir, entre otras, las infraestructuras viarias. No va a resultar tarea fácil. Pero, sobre todo, habrá que precisar si lo que se ejecute garantiza la seguridad.

La inestabilidad sísmica y volcánica de la isla puede desaconsejar volver a construir viviendas. Y en este sentido, vulcanólogos y geólogos tendrán mucho que decir. Porque, como todos sabemos, el archipiélago canario, del mismo modo que otros archipiélagos, tiene su origen en erupciones volcánicas submarinas. Y los volcanes siguen estando ahí.

Con el paso del tiempo, el suelo magmático se tornará fértil y productivo. Y La Palma volverá a ser un vergel. Pero habrá que esperar.

Publicado en ‘La Región’ (23.10.2021 y en ‘Faro de Vigo' (09.11.2021), en la sección  ‘Cartas al Director’


lunes, 6 de septiembre de 2021

Megavatio récord













Por Robert Newport

03 septiembre 2021

En la nueva Tarifa 2.0TD de la energía eléctrica, existen tres períodos de discriminación horaria: punta, llano y valle (precio más alto, precio algo más bajo y precio más bajo, respectivamente). Estas denominaciones son muy significativas: que el precio del megavatio hora tiene un claro componente «topográfico». Y en cuestión de orografía, en Galicia vamos sobrados.

El período valle, correspondiente al precio más bajo, comprende la franja horaria: 00.00 a 08.00 horas, período recomendado para poner la lavadora. Sin embargo, como es lógico, existen normativas municipales que prohíben los ruidos en las viviendas a horas tan intempestivas, con el fin de no perturbar el descanso de los vecinos. Lo que, por otra parte, hemos de considerar razonable para una sana convivencia. Porque, aunque es cierto que la tecnología ha conseguido lavadoras muy silenciosas, todavía las hay que hacen mucho ruido. Y esperemos que a nadie se le ocurra pasar la aspiradora. Que no son horas, ¡coño!

Y si, además de poner la lavadora, también aprovechamos ese tramo horario para planchar, los nuevos hábitos nos convertirán en noctámbulos domésticos. ¡Lo que nos faltaba! Y luego nos asombramos de que en España tengamos una tasa de natalidad tan baja (7,15 nacimientos por cada mil habitantes). ¡Pues claro! Nos vamos a la cama «deslomados» y con un sueño del «copón». Y en ese estado tan lamentable, ¿quién va a poder darle alegría a tu cuerpo, «Macarena»?

La factura del consumo eléctrico —el recibo de la luz, de toda la vida— siempre fue motivo de preocupación y sobresalto. Por una parte, la incertidumbre del importe. Por otra, el galimatías de datos que nunca hemos comprendido del todo. Y si, además, figura alguna nota aclaratoria, justificando lo injustificable, la confusión que se crea es mayúscula. Así, inevitablemente, siempre tenemos la percepción, la sospecha, de que nos están engañando. Y en los últimos meses, para nuestro desconcierto —y vaciar todavía más nuestros bolsillos—, el precio del megavatio hora ha iniciado una escalada que no parece tener fin, batiendo un nuevo récord cada día. Y así hasta el infinito, si el Gobierno no se pone las «pilas».

Publicado en ‘Faro de Vigo’ (06.09.2021) y ‘La Región’ (07.09.2021), en la sección  ‘Cartas al Director’


domingo, 8 de agosto de 2021

Agravio comparativo


Por Robert Newport

07 agosto 2021

El Ejecutivo catalán recibirá 1.700 millones de euros para ampliar el aeropuerto de El Prat de Barcelona, como medida indispensable para reactivar la economía y, según dicen, crear decenas de miles de puestos de trabajo. También pretenden la gestión del aeropuerto, el puerto y la zona franca. Y no olvidemos que entre sus prioridades reivindicativas continúan estando la autodeterminación —impreso en su ADN— y la amnistía, así como una extensa lista de requerimientos —¡exigencias!— que, no tengo la menor duda, se irán sucediendo. Son insaciables, y su ambición no tiene límites. Su arrogancia hace que se consideren superiores, porque la humildad no es una de sus virtudes.

Pero ya lo decía el exministro José Bono, al referirse al independentismo catalán: «Quien quiere separarse y quiere comer aparte es porque quiere comer más».

Dice el refrán: «Contra el vicio de pedir, la virtud de no dar». Pero ERC apoyó los Presupuestos Generales del Estado, y los favores políticos siempre se pagan con elevados intereses. Sin embargo, la transigencia del Gobierno de España con Cataluña, así como las prebendas subsiguientes, supondrá un agravio comparativo para las otras comunidades autónomas, oscureciendo todavía más el actual panorama político. Pero, al precio que se ha puesto últimamente el megavatio, a ver quién se atreve a encender la luz.

Publicado en ‘Faro de Vigo’ y ‘La Región’ (09.08.2021), en la sección ‘Cartas al Director’

lunes, 19 de julio de 2021

¿Para qué tanto ruido?


Por Robert Newport

18 julio 2021

Hemos de considerar que el estado de alarma decretado por el Gobierno en la primera ola de la pandemia, con el consiguiente confinamiento de la ciudadanía de este país, y que el Tribunal Constitucional acaba de anular, no ha sido un capricho ni una ocurrencia, sino una impopular y valiente medida preventiva, tan necesaria como eficaz, que, como dice el Ejecutivo, permitió salvar varios cientos de miles de vidas. Y en una situación de extrema gravedad, que todavía seguimos soportando, eso es lo realmente importante.

Según el Constitucional, en lugar del estado de alarma tendría que haberse declarado el estado de excepción. ¿Habría cambiado en algo el resultado de haberse aplicado ese otro instrumento legal? Rotundamente no. Lo significativo era tomar una decisión urgente para frenar el avance de la pandemia. Las situaciones excepcionales requieren medidas excepcionales, obviando formulismos innecesarios, para la resolución y ejecución de las actuaciones.

En una situación tan grave como la provocada por la pandemia del Covid-19, que Vox haya presentado recurso de inconstitucionalidad del estado de alarma, alegando vulneración de derechos fundamentales, representa una bajeza moral sin paliativos. Una acción vergonzosa e interesada, inducida por una desmesurada ambición de poder y un descarado afán de notoriedad. La cuestión es hacer ruido. Cuanto más, mejor. Malgastando, inútilmente, tiempo y recursos que nos pertenecen a todos.

Tenía razón Groucho Marx: «La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados».

Publicado en ‘La Región’ (19.07.2021) y ‘Faro de Vigo' (21.07.2021), en la sección ‘Cartas al Director’


viernes, 18 de junio de 2021

Carta abierta a un cavernícola



Por Robert Newport

17 junio 2021

Usted, padre Báez, que a través de las redes sociales ha difundido mensajes claramente machistas y retrógrados, justifica el asesinato de las pequeñas de Tenerife, Anna y Olivia, de 1 y 6 años, respectivamente, presuntamente cometido por su propio padre —al que usted, incomprensiblemente, califica de víctima— responsabilizando de este horrible suceso a la «infidelidad» de la madre, que, tras haberse separado de su marido, había iniciado una nueva relación.

Que un sacerdote haga este tipo de declaraciones —incontinencia verbal aguda—, justificando una venganza cobarde y miserable, negando un más que evidente caso de violencia vicaria, tendría que suponer la fulminante inhabilitación para el ejercicio de su ministerio. ¿Qué catequesis y principios éticos puede impartir alguien que niega la igualdad de derechos y oportunidades entre el hombre y la mujer?

Si en pleno siglo XXI, todavía hay quien cuestiona esos derechos fundamentales, mejor sería que regresara a las cavernas de las que nunca tendría que haber salido.

A pesar de las evidencias, los negacionistas radicales como usted continúan sin reconocer la existencia de la violencia de género y de la violencia vicaria. Lástima que la «Ciencia» no haya descubierto todavía una vacuna contra este «virus» pandémico.

Publicado en ‘La Región’ (18.06.2021) y ‘Faro de Vigo’ (20.06.2021), en la sección ‘Cartas al Director’


jueves, 25 de marzo de 2021

Travesía mortal

 














Por Robert Newport

23 marzo 2021

Tenías solo 2 años, pequeña Nabody. Procedías de Mali, huyendo del horror y del hambre. La precaria embarcación, rumbo a la incertidumbre, te trajo a una falsa «tierra prometida», a un «paraíso» inexistente. Pero tu pequeño y frágil corazón, debilitado por tanto sufrimiento, no soportó la dura travesía y se paró al arribar a la costa española de Canarias.

Fuiste otra víctima inocente de la sinrazón del comportamiento humano, cuando apenas habías empezado a vivir. Porque el destino, esa caprichosa fuerza desconocida, tantas veces cruel, no te permitió desarrollar el natural ciclo vital: nacer, crecer y morir.

Sucesos luctuosos como el acontecido nos desgarran el corazón, resquebrajan nuestras convicciones espirituales, y hacen que cuestionemos nuestra Fe. Descansa en paz, pequeña y llorada Nabody. Que la tierra te sea leve.

Publicado en ‘La Región’ (24.03.2021), ‘La Voz de Galicia’ (25.03.2021) y ‘Faro de Vigo’ (26.03.2021), en la sección ‘Cartas al Director’

 

domingo, 17 de enero de 2021

Situación límite





Por Robert Newport
16 enero 2021

Nunca, como en las actuales circunstancias, fue tan determinante tener en cuenta la Ley de Murphy: «Si algo malo puede ocurrir, ocurrirá». ¡Salvar la Navidad! Esa fue la consigna, la prioridad que irónicamente nos recuerda el film «Salvar al soldado Ryan», permitiendo los desplazamientos entre comunidades autónomas, obviando los cierres perimetrales, para propiciar las reuniones familiares. Pero la pandemia no es una película, es la cruda realidad de una situación límite, desesperada, que condiciona nuestras vidas. 

La permisividad en la observancia de las restricciones ha sido la causa de la nueva escalada de contagios, un aumento de las hospitalizaciones y, lo que es peor, de fallecimientos. Y las UCI, así como el sacrificado personal sanitario, duplicando y triplicando turnos, se encuentran al borde del colapso. Y en esa desafortunada dinámica, nuestros gobernantes no han tenido la valentía de tomar las decisiones correctas, por considerarlas impopulares, escudándose en unos datos que mostraban una ficticia mejoría de la situación pandémica. 

Si a un paciente que muestra una ligera mejoría se le suprime la medicación, inevitablemente su estado se agravará. Es condición sine qua non, por tanto, mantener el tratamiento hasta la curación total. Y así han de entenderse las actuaciones sobre la pandemia del covid-19. De lo contrario, volveremos a estar como al principio. En cuyo caso, aun a nuestro pesar, tendremos que dar credibilidad a la cita literaria: «La mayoría de los políticos son como alfileres: sus cabezas no son lo más importante».

Publicado en ‘La Región’ (17.01.2021) y ‘Atlántico Diario’ (21.01.2021), en la sección ‘Cartas al Director’



viernes, 1 de enero de 2021

¡Adiós 2020!



Por Robert Newport

29 diciembre 2020

Recurriendo a la expresión mitológica de la caja de Pandora: «La Esperanza es lo último que se pierde», esperábamos que fueras mejor año que tu predecesor. Pero nos has defraudado.

En el panorama político en nuestro país, las aguas han bajado turbias y revueltas; y en todo momento, el horizonte se presentó difuminado e incierto. El desequilibrio económico originado por la pandemia ha sido de tal magnitud, que los inevitables y contundentes ajustes para la recuperación supondrán nuevos sacrificios para todos.

El rey emérito, Juan Carlos I, ha puesto pies en polvorosa —Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) ha sido su destino— acuciado por presuntos delitos de corrupción, fraude fiscal y blanqueo de capitales. La violencia de género, esa epidemia machista que no cesa, ha segado la vida de más de 40 mujeres en nuestro país. Y la migración, ese fenómeno del que se nutren las mafias, ha continuado sembrando de víctimas mortales las frías aguas del mar en el que, además de sus vidas, también ahogaron sus sueños. Y los hombres, mujeres y niños que lograron alcanzar nuestras costas en frágiles embarcaciones, creyeron haber llegado a la «tierra prometida».

Has sido un año nefasto, que quisiéramos olvidar. Pero seríamos injustos, porque has causado mucho sufrimiento. Durante nueve largos meses, has dado cobijo al coronavirus covid-19 que ha infectado a más de 77 millones de personas en el mundo, y la cifra de fallecidos ha superado el millón y medio. Aquellos que perdieron a un ser querido sin el consuelo de haberle dado un último abrazo, el último adiós, jamás te podrán olvidar.

Viviremos con las cicatrices de todos los adiós que no hemos podido pronunciar y de todos los abrazos que no hemos podido dar, pero seguir viviendo será nuestra venganza. ¡Bienvenido 2021!

Publicado en ‘La Región’ (30.12.2020), ‘Atlántico Diario’ (01.01.2021), en la sección ‘Cartas al Director’