lunes, 26 de noviembre de 2018

Exabruptos de sus Señorías





Por Robert Newport
26 noviembre 2018

El ámbito político continúa enrarecido. Las rivalidades internas en los partidos, a modo de intrigas palaciegas, se hacen más evidentes cada día. El ambiente de crispación que se respira en el Congreso, en el que ciertos diputados —políticos de vía estrecha— se erigen en adalides de la grosería y la mala educación, con una incontinencia verbal barriobajera en la que predomina el insulto y la descalificación, propicia que todos vayan con la «escopeta» cargada de peregrinas y dispersas argumentaciones: trifulcas abstractas obviando lo concreto, en un claro y desmesurado afán de notoriedad.

Con este panorama, en el que los actores de la escena política observan un comportamiento impropio de quienes representan a la ciudadanía que los ha elegido, sería deseable que abandonaran sus escaños y se dedicaran a otros menesteres.

Consecuentemente, como dijo el científico y escritor alemán, Georg Chistoph Lichtenberg: «Cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen pierden el respeto».


Publicado en ‘La Voz de Galicia’ y ‘Faro de Vigo’ (26.11.2018), en la sección ‘Cartas al Director’