Citas literarias (1)
- ¿Has cumplido con tu deber? Confía en el Cielo
que no te abandonará. (Samaniego).
- ¿La frase más hermosa? La más corta. (Anatole
France).
- ¿Popularidad?
Eso es la gloria en perras gordas. (Víctor Hugo).
- ¿Qué es un adulto? Un niño inflado por la
edad. (Simona de Beauvoir).
- A los niños debe enseñárseles a investigar por
sí mismos. (Orígenes).
- A mí
dadme lo superfluo, que lo necesario todo el mundo puede tenerlo. (Oscar
Wilde).
- Al poder le ocurre como al nogal, no deja
crecer nada bajo su sombra. (Antonio Gala).
- Amigos
verdaderos son los que vienen a compartir nuestra felicidad cuando se les
ruega, y nuestra desgracia sin ser llamados. (Demetrio de Falerea).
- Amo la casa en la cual no veo nada superfluo y
encuentro todo lo necesario. (Benjamín Franklin).
- Aunque no te ocupes de la política, ella se
ocupará de ti. (Yves Montand).
- Buscando el bien de nuestros semejantes
encontraremos el nuestro. (Platón).
- Cada guerra es una destrucción del espíritu
humano. (Henry Miller).
- Cada niño, al nacer, nos trae el mensaje de que
Dios no ha perdido aún la esperanza en los hombres. (Tagore).
- Cada vez que se encuentre usted del lado de la
mayoría, es tiempo de hacer una pausa y reflexionar. (Mark Twain).
- Cada virtud sólo necesita un hombre; pero la
amistad necesita dos. (Montaigne).
- Caminante no hay camino, se hace camino al
andar. (Antonio Machado).
- Cásate con un arqueólogo, cuanto más vieja te
hagas más encantadora te encontrará. (Agatha Christie).
- Casi todos los crímenes que castiga la ley se
deben al hambre. (François René Chateubriand).
- Comed en casa como si comierais en la del rey.
(Confucio).
- Comprender es el principio de aprobar. (Baruch
Benedict Spinoza).
- Confía en el tiempo, que suele dar dulces
salidas. (Miguel de Cervantes Saavedra).
- Conviene desconfiar de las personas prudentes
cuando se las ve agobiadas. (Friedrich Nietzsche).
- Cree a aquellos que buscan la verdad, duda de
los que la han encontrado. (André Gide).
- Cuando el peligro parece ligero, deja de ser
ligero. (Sir Francis Bacon, Barón de Verulam).
- Cuando la necesidad nos arranca palabras
sinceras, cae la máscara y aparece el hombre. (Lucrecio).
- Cuando me da por pensar de noche en mis
defectos, me quedo dormido inmediatamente. (Óscar Wilde).
- Cuando se es amado, no se duda nada. Cuando se
ama se duda de todo. (Colette).
- Cuando se es ensalzado por el enemigo, es que
se ha hecho algo mal. (Amintore Fanfani).
- Cuando se hace uno viejo le gusta más releer
que leer. (Pío Baroja).
- Cuando se teme a alguien, es porque a ese
alguien le hemos concedido poder sobre nosotros. (Hermann Hesse).
- Cuando se trata de dinero todos son de la
misma religión. (Voltaire).
- Cuando siento una terrible necesidad de
religión salgo de noche para pintar las estrellas. (Van Gogh).
- Cuando un hombre pide justicia es que quiere
que le den la razón. (Santiago Russinyol).
- Cuando un hombre se echa atrás, retrocede de
verdad. Una mujer sólo retrocede para coger carrerilla. (Zsa Zsa Gabor).
- Cuantas menos necesidades tengáis, más libres
seréis. (César Cantú).
- Cuanto más alto coloque el hombre su meta,
tanto más crecerá. (Friedrich von Schiller).
- Cuanto más conozco a los hombres, menos los
quiero; si pudiese decir otro tanto de las mujeres me iría mucho mejor.
(George Gordon Byron, “Lord Byron”).
- Cuanto más se envejece más se parece la tarta
de cumpleaños a un desfile de antorchas. (Catherine Hepburn).
- Cuanto menos piensan los hombres, más hablan.
(Charles de Montesquieu).
- Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo.
(Arquímedes).
- De virtud hay una especie, de maldad, muchas.
(Platón).
- Debe haber algo extrañamente sagrado en la
sal: está en nuestras lágrimas y en el mar. (Khalil Gibran).
- Degustan más los sueños del futuro que la
historia del pasado. (Thomas Jefferson).
- Del trabajo proviene cuanto de grande hay en
el hombre, y la civilización es un producto. (Smiles).
- Demasiado
al Este es el Oeste. (Proverbio inglés).
- Desde el momento en que uno no puede esperar
vengarse, comienza a odiar. (Stendhal).
- Detrás de cada hombre con éxito hay una mujer
sorprendida. (Anónimo).
- Dios, aunque invisible, tiene siempre una mano
tendida para levantar por un extremo la carga que abruma al pobre.
(Gustavo Adolfo Bécquer).
- Donde hay poca justicia es grave tener razón.
(Francisco de Quevedo y Villegas).
- Educad a los niños y no será necesario
castigar a los hombres. (Pitágoras).
- Educar no es dar carrera para vivir, sino
templar el alma para las dificultades de la vida. (Anónimo).
- El
hombre tiene que establecer un final para la guerra. Si no, la
guerra establecerá un final para la humanidad. (Kennedy).
- El aburrimiento es una mala hierba, pero
también una especia que hace digerir muchas otras. (Johann Wolfgang von
Goethe).
- El aburrimiento no puede existir donde quiera
que haya una reunión de buenos amigos. (Françoise René de Chateubriand)
- El afán de perfección hace a algunas personas
totalmente insoportables. (Pearl S. Buck).
- El andar tierras y comunicar con diversas
gentes hace a los hombres discretos. (Cervantes).
- El arte de dirigir consiste en saber cuando
hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta. (Karajan).
- El arte de dirigir muchedumbres consiste en
saber decirles lo que ellas piensan. (Jacinto Benavente).
- El arte es la filosofía que refleja el
pensamiento. (Tápies).
- El arte es sobre todo un estado del alma.
(Marc Chagall).
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