sábado, 9 de junio de 2018

Carta abierta a Pedro Sánchez Pérez-Castejón


Por Robert Newport
06 junio 2018

Señor Sánchez: Permítame felicitarle por su reciente nombramiento como presidente del Gobierno de España.
Es cierto que no han sido los votos de los ciudadanos los que han propiciado que usted sea el nuevo jefe del Ejecutivo. Sin embargo, en la moción de censura contra el señor Rajoy, ha contado con los votos de los partidos independentistas, catalanes y vascos, entre otros, que, dicho sea de paso, no respetan la Constitución, no se consideran españoles ni reconocen al rey Felipe VI como jefe del Estado.
Ha escogido usted unos «extraños» compañeros de viaje. Pero gracias a ellos, al haber apoyado su moción de censura contra el señor Rajoy, es usted el nuevo inquilino del Palacio de la Moncloa. Pero esos apoyos no serán gratuitos. Y usted lo sabe. Por ello, para no desmembrar e hipotecar España, concesiones, las justas.
Le espera un arduo y espinoso camino por recorrer, que esperamos no se convierta en una estéril travesía del desierto. Porque una cosa es tener adversarios políticos, que son necesarios para que un sistema democrático funcione con eficacia y dinamismo. Y otra muy distinta, tener enemigos declarados —el Partido Popular ejercerá una férrea e implacable oposición— que obstaculizan el normal funcionamiento de las tareas políticas del Gobierno. Y esta, señor presidente, será su cruz. 


Publicado en 'La Voz de Galicia' (08.06.2018), en la sección 'Cartas al Director'

2 comentarios:

  1. Es una pena que no quiera entrar en politiqueos porque hoy me lo pide el cuerpo. Para mi es muy importante la educación y Sánchez el día que llamó indecente a Rajoy lo "taché". No fue en el calor de una discusión...Y esta vez sencillamente fué una traición. ¡que les vaya bonito...! Y a esperar lo siguiente. .Un abrazo muy fuerte

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    1. La ambición —¡el hambre!— de poder, siempre conduce a la incontinencia verbal. Y esa «diarrea» dialéctica lleva a algunos políticos a manifestarse con palabras y frases desafortunadas e inconvenientes. Estaremos atentos y vigilantes, Marité. Un fuerte abrazo.

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