01 enero 2018
Amigo
imaginario:
Desde el 10 de noviembre del pasado año, no he
vuelto a escribirte. Tampoco te felicité por Navidad ni te deseé Feliz Año
Nuevo. Un problema familiar, que continúa, me tuvo, y me sigue teniendo,
ocupado y muy preocupado. Espero que sepas disculparme.
En el año que se ha ido, algunos sucesos han sido
muy negativos para España, en general, y para Cataluña, en particular. Como
recordarás, los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) causaron 15
víctimas mortales y más de un centenar de heridos, además de los cinco
terroristas que resultaron muertos por los disparos de los mossos d’ Esquadra.
El terrorismo yihadista, una vez más, causó dolor y muerte en nuestro país.
Por otra parte, como también recordarás, el ya
expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que se encuentra
autoexiliado en Bruselas, huido de la Justicia, con la ingenua intención de
poner su particular pica en Flandes, declaró la República Independiente de
Cataluña, obviando la Constitución, en un flagrante desafío al Gobierno de
España.
Asimismo, el noble deporte del balompié, que llegó
a nosotros a través de los marinos de la British Royal Navy,
tampoco se libró de la corrupción tan omnipresente en nuestro país. El que
fuera presidente de la
Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, fue
encarcelado por presunto saqueo de las arcas de la entidad que presidió durante
29 años.
Aún no hay sentencia firme contra Iñaki Urdangarin
y su esposa, la
Infanta Cristina , investigados por su presunta implicación en
el Caso Nóos. Mientras tanto, continúan su retiro dorado en Suiza, en un
flagrante agravio comparativo con otros casos de índole similar. Lo que viene a
demostrar, una vez más, que la
Justicia no es igual para todos.
En Galicia, junto con Asturias y Portugal, los
incendios forestales devastaron montes y bosques, dejando a la población rural
sin sus casas, además de causar la pérdida de vidas humanas.
Al fin se ha detenido al autor confeso del
asesinato de Diana Quer -la joven que desapareció en A Pobra do Caramiñal (A
Coruña) la noche del 22 de agosto de 2016-, cuyo cuerpo sin vida se hallaba en
un pozo de 10 metros de profundidad en
el sótano de una nave industrial abandonada. El pasado lunes 25 de diciembre,
el ahora detenido intentó agredir a una joven que denunció ante la Guardia
Civil que en Boiro (A Coruña), un hombre había intentado robarle el móvil,
amenazándola con un cuchillo, y trató de introducirla en el maletero de su
vehículo. Los gritos de la joven alertaron a dos clientes de un bar cercano,
que acudieron en su ayuda, y el agresor consiguió escapar en su vehículo. El
detalle de los rasgos físicos del individuo, detallados por la joven, facilitaron su detención.
Finalmente, querido amigo, en el año que se ha
extinguido, la violencia machista ha vuelto a causar alrededor de medio
centenar de víctimas mortales. El desempleo continúa en imparable escalada. La
precariedad laboral, con contratos por horas, días, semanas... -¡una
vergüenza!- es la tónica general. Y el
irrisorio aumento de las pensiones (0,25%) que, en los últimos años, ha
supuesto para los ninguneados pensionistas una importante pérdida de poder
adquisitivo.
Y esta ha sido, a grandes rasgos, la crónica negra
(black chronic) de un año que no merece la pena recordar.
Deseo que este año (2018) que comienza, lo
disfrutes con salud.
Un fuerte abrazo.
Robert
Robert
19 marzo 2018
Amigo
imaginario:
En primer lugar, mi felicitación: hoy se celebra el
Día del Padre. Y tú, en mi imaginación, lo eres.
Hay varias cuestiones que quiero comentarte. En
este país nuestro, últimamente hay mucho movimiento ciudadano evidenciando su
descontento, para llamar la atención del Gobierno. En primer lugar, desde el
pasado día 7 de febrero, los
funcionarios de Justicia de Galicia están en huelga. Y los juzgados, como
puedes imaginar, están bajo mínimos y colapsados, con muchos juicios aplazados sine die. Incluso, obtener certificados
de nacimiento, de matrimonio, de defunción, fe de vida... en el Registro Civil,
es casi misión imposible. Y, hasta la fecha, las conversaciones entre la Xunta de Galicia y los
sindicatos no consiguen desbloquear la paralización.
En segundo lugar, el pasado día 8 de este mes de
marzo, Día Internacional de la Mujer, la movilización de las mujeres, en una
masiva manifestación sin precedentes, abarrotó las calles de pueblos y ciudades
de todo el Mundo reclamando derechos, igualdad y justicia. El acoso sexual, la violencia y la
discriminación, estuvieron muy presentes en las pancartas y en los discursos
reivindicativos. España fue ese día un referente mundial. Todo un éxito.
Otra cuestión, amigo mío, fueron las manifestaciones
de jubilados, que tuvieron una gran presencia en las calles de pueblos y
ciudades de España, en demanda pensiones dignas y de un aumento anual
equivalente al Índice de Precios al Consumo (IPC) al objeto de no perder poder
adquisitivo. Es una llamada de atención al Gobierno, a la vez que se manifiesta
la indignación y el descontento de los pensionistas. Y el PP, partido que
ostenta el poder, no puede obviar que el cabreo monumental del numeroso
colectivo de jubilados puede pasarle factura en las urnas.
Finalmente, un asunto que considero de máxima gravedad: el Pleno del
Congreso ha avanzado en la derogación de la denominada prisión permanente
revisable, que el Gobierno de Mariano Rajoy había incluido en el Código Penal,
al ser rechazadas las enmiendas del Partido Popular y Ciudadanos, en un debate
muy polémico.
El único caso en el que, hasta ahora, se ha
aplicado la prisión permanente revisable, ha sido el del vecino de Moaña
(Pontevedra), David Oubel, que después de drogar a sus hijas de 4 y 9 años, las asesinó utilizando una sierra
radial. Un crimen horrible que merece un castigo ejemplar.
Casos como el de los niños Ruth y José, de 6 y 2
años, a los que su padre, José Bretón, asesinó y quemó. El de la joven Diana
Quer, asesinada y tirada a un pozo. O el de Gabriel Cruz, el niño de 8 años
asesinado por su madrastra. Atrocidades que merecen un castigo severo e inapelable, en concordancia con el delito
cometido.
Naturalmente, siempre hay quien discrepa diciendo
que la prisión permanente revisable es inhumana. Sin embargo, el hecho de que
el criminal tenga que pasar en prisión entre 25 y 35 años, nunca será tan
inhumano como el asesinato que ha cometido. Es cierto, sin embargo, que la
privación temporal de libertad, la reclusión penitenciaria, ha de tener como
objetivo la rehabilitación y posible reinserción social del reo. Pero,
tratándose de criminales como los de los casos citados, existen muy pocas
garantías de que el buen comportamiento del asesino en reclusión sea indicativo
de que se ha rehabilitado. A pesar de todo, es cierto que ha de dársele la
oportunidad de demostrarlo. Aunque, lamentablemente, las víctimas nunca tendrán
esa oportunidad.
¿Se puede considerar justo que, sin la aplicación
de la prisión permanente revisable, un asesino pueda estar en la calle, como si
tal cosa, a los siete años de haber ingresado en prisión por haber cometido un
crimen? ¿Te imaginas el impacto emocional que puede suponer para la familia de
una víctima encontrarse con el asesino paseando tranquilamente por las calles
de su ciudad o, tal vez, en su mismo barrio? ¿Puedes imaginártelo, amigo mío?
Un fuerte abrazo.
Robert
25 abril 2018
Amigo
imaginario:
Me temo que este desaguisado no hay quien lo
arregle. En mi carta anterior, te decía que los funcionarios de Justicia de
Galicia, que reclaman mejoras salariales, estaban en huelga desde el pasado día
7 de febrero. Pues bien, a pesar del tiempo transcurrido (78 días), todavía
continúan.
Las negociaciones entre los representantes
sindicales y la Xunta de Galicia, tras celebrar la enésima reunión, no solo no
han logrado el acuerdo deseado, sino que se han vuelto más tensas. Y el
conflicto continúa ralentizando, todavía más, la tan necesaria administración
de Justicia. Se han aplazado más de 15.000 juicios, no se instruyen causas
abiertas por investigaciones de delitos, están desatendidas las tramitaciones
de fe de vida para el cobro de pensiones, así como certificados de defunción o
notificaciones necesarias para contraer matrimonio. Asimismo, no se tramitan
los permisos temporales o la concesión del tercer grado a los reclusos.
Esta huelga, que tiene su origen en la escasez de presupuesto,
así como en la precariedad de medios y recortes de personal, está derivando en
una especie de «metástasis» que afecta, a la vez que a los negociadores,
también a los jueces, fiscales, abogados y procuradores, siendo estos dos
últimos grupos de profesionales los más perjudicados económicamente. Por todo
ello, según he podido leer en la prensa, los colegios de abogados de A Coruña y
Santiago están adelantando el pago del turno de oficio correspondiente al
primer trimestre —normalmente se paga en el mes siguiente al vencimiento de
aquél—, para tratar de compensar el perjuicio económico que les está causando
la huelga.
Al final, amigo mío, la política lo controla todo.
Ya lo decía el actor y cantante italo-francés, Ives Montand: «Aunque no te
ocupes de la política, ella se ocupará de ti».
Toda «acción» del Gobierno, que la ciudadanía
considere injusta, siempre provoca una «reacción» de los colectivos sindicales
en defensa de los intereses de los trabajadores. Muy especialmente, en el
ámbito de las administraciones públicas. Y, al final, los perjudicados somos
todos.
No quería finalizar esta epístola sin hacer
referencia a la anómala y comprometida situación que está viviendo la
universidad pública, Rey Juan Carlos, por
un supuesto máster que figuraba en el currículo de la presidenta de la Comunidad de Madrid,
Cristina Cifuentes —del Partido Popular—, presumiblemente obtenido, u otorgado,
de forma sospechosa o, digamos, irregular.
Asediada por las duras críticas recibidas de todas
las formaciones políticas —incluidos algunos dirigentes de su propio partido—,
que, además, pedían su dimisión por haber mentido, decidió renunciar
públicamente a ese máster que, por mucho que se esfuerce en demostrar lo
contrario, oficialmente nunca existió.
Pero hoy —¡sorpresas te da la vida!—, la
publicación de un vídeo en el digital ok
diario, propició que la ya expresidenta de la Comunidad de Madrid
presentara su dimisión.
En el año 2011, las cámaras de un supermercado
grabaron al vigilante jurado registrando el bolso de la señora Cifuentes
—otrora vicepresidenta de la Asamblea de Madrid—, tras haber sustraído dos
botes de crema cosmética. Finalmente, pidió disculpas, alegando que había sido
un acto involuntario, y abonó el importe correspondiente (40 euros). El
supermercado no presentó denuncia alguna. Y asunto concluido. Pero la grabación
de ese lamentable y vergonzoso episodio, como todas las que se realizan a
través de las cámaras de vigilancia, de acuerdo con la Ley de Protección de
Datos, tendría que haber sido destruida un mes después. Sin embargo, alguien
hizo una copia, que guardó durante siete años, esperando el momento
oportuno para venderla al mejor postor.
En cualquier caso, aun siendo censurable, que lo
es, sin ninguna duda, este episodio de cleptomanía de la señora Cifuentes,
considero que tendría que haber dimitido por el primer hecho —haber mentido en
su currículo—, más que por el segundo.
Como puedes
ver, amigo mío, la corrupción es poliédrica: tiene múltiples facetas. Y,
lamentablemente, continúa teniendo una gran presencia en todos los ámbitos, en
este país llamado España.
Un fuerte abrazo.
Robert
04 mayo 2018
Amigo
imaginario:
Los acontecimientos se precipitan. El pasado día 27
de abril, dos días después de haber presentado la dimisión como presidenta de la Comunidad de Madrid,
Cristina Cifuentes, en una carta dirigida a la secretaria general del PP, María
Dolores de Cospedal, también dimitió como presidenta del PP de Madrid.
Esta es la carta que, publicada en distintos
periódicos digitales, Cifuentes le envió a Cospedal:
Dª María Dolores de
Cospedal
Secretaria General
Partido Popular
C/ Génova, 13
Madrid
Querida María Dolores:
Me dirijo a ti para
comunicarte formalmente mi renuncia irrevocable a la Presidencia del Partido
Popular de Madrid, rogándote des traslado de la misma a nuestro Presidente
Nacional, Mariano Rajoy.
Asumí la enorme
responsabilidad de presidir el PP de Madrid durante el XVI Congreso, celebrado
en marzo de 2017, y, desde entonces, he trabajado incansablemente por y para el
Partido Popular.
Se trata de una decisión
muy dolorosa para mí, porque llevo militando en este partido mucho más de la
mitad de mi vida, dando siempre lo mejor de mí y luchando por principios y
valores que creo son buenos para Madrid y, sobre todo, para España.
Esta es la segunda
renuncia que hago en menos de dos días. Primero, como sabes, fue la Presidencia
de la Comunidad de Madrid. Ahora, la Presidencia del PP de Madrid.
Responsabilidades que, en ambos casos, asumí gracias a la confianza de los
madrileños y de los militantes de nuestro partido.
Pese a todo, y
lamentablemente, me he visto obligada a tomar estas dificilísimas decisiones,
para no perjudicar ni a los madrileños, poniendo en riesgo la Pres¡dencia de la
Comunidad, ni a nuestro querido partido, que necesita estabilidad para
continuar un proyecto político de centro que tan positivos resultados está obteniendo
en nuestra región.
He sido siempre leal a
nuestro Presidente, cuyo respaldo, aliento
y cariño nunca me han faltado, y que agradezco expresamente; a nuestro
Partido, que tanto ha hecho por España, y a todos los madrileños, a los que me
votaron y me apoyaron, y a los que no lo hicieron.
No hace falta que haga
especial mención, María Dolores, a mi lealtad hacia ti, no solo porque eres la
Secretaria General del partido, sino porque también eres mi amiga, y siempre me
lo has demostrado.
Esté donde esté en cada
momento, siempre podréis contar conmigo.
Un beso muy fuerte.
Fdo. Cristina Cifuentes
Como puedes ver, querido amigo, el panorama
político está muy revuelto últimamente. Todo cambia en poco tiempo. El Partido
Popular, con varios frentes abiertos, está sumergido en un lodazal del que, me
temo, no le va a resultar fácil salir.
El conflicto de Cataluña, continúa siendo el
«caballo de batalla» de la política española. Las pensiones, que no se podían
subir por falta de recursos, ahora, por meros intereses estratégicos —conseguir
aprobar los presupuestos—, se van a aumentar un 1,3%. Continúa la huelga de los
funcionarios de Justicia en Galicia, aunque el bajo seguimiento de los últimos
días, permitió retomar el trabajo en muchos juzgados. Esta sí es una buena
noticia.
Finalmente, amigo mío, el pasado día 3 de este mes
de mayo, la organización terrorista ETA, a través de un comunicado, confirma su
disolución después de 60 años de actividad. No voy a abundar sobre este asunto.
Pues, como recordarás, en mi carta del 18 de abril de 2017, ya expuse
sobradamente todo lo que tenía que decir sobre las atrocidades cometidas por
esta banda de asesinos.
Únicamente quiero añadir que me pareció excesivo el
gran despliegue mediático que suscitó ese comunicado que, para más recochineo,
fue leído por dos históricos de la organización: José Antonio Urrutikoetxea
(Josu Ternera) —que continúa huido de la Justicia desde el 2003— y Soledad Iparraguirre
(Anboto) —recluida en una cárcel francesa donde cumple condena tras ser detenida
en el 2004—. Y me indigna, sobre todo, que el líder de la izquierda aberzale,
Arnaldo Otegi, haciendo gala de su habitual cinismo, asegure que se abre «un
nuevo tiempo de manera definitiva». ¡Qué bien!
Querido amigo imaginario, a pesar de que la actualidad
está cargada de despropósitos, te deseo un buen fin de semana.
Un fuerte abrazo.
Robert
25 mayo 2018
Amigo
imaginario:
¡Esto no hay quién lo aguante! Lamento que, una vez
más, la corrupción en el ámbito político vuelva a ser el tema predominante en
esta nueva carta. Pero es que cada día —¡qué agotamiento!—, un nuevo caso
destaca en los titulares de los periódicos y de los informativos. Son tantos
los personajes (delincuentes de alto standing) que hemos visto desfilar por los
tribunales —y lo que te rondaré...—, que este país se ha convertido en una
especie de moderna cueva de Alí-Babá.
El pasado martes (22.05.2018), agentes de la Unidad
Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, después de dos años de pacientes
investigaciones, detuvieron a Eduardo Zaplana —otrora ministro de Trabajo y Asuntos Sociales en el
Gobierno de José María Aznar—, dentro de la «Operación Erial», cuando
intentaba repatriar parte de los diez millones y medio de euros que tenía
ocultos en un entramado de empresas y oficinas en Panamá y Uruguay, procedentes
del cobro de comisiones —«mordidas»— por adjudicaciones durante los siete años
que presidió la Generalitat Valenciana (1995-2002).
A la vista de lo expuesto, amigo mío, hemos de
concluir que, para vergüenza propia y ajena, la corrupción representa ya la
nueva «marca España».
Como dato anecdótico —¡lo qué hay que oir, coño!—,
a Eduardo Zaplana se le atribuyen las, muy poco edificantes, frases: «Necesito
mucho dinero para vivir» y «Yo estoy en política para forrarme». Hemos de
reconocer que ha sido consecuente.
Una vez conocida la detención del señor Zaplana,
Telefónica —empresa a la que se había incorporado en el 2008 como delegado en
Europa— decidió suspender cautelarmente la relación laboral con el exministro.
Del mismo modo, y de forma inmediata, el PP lo suspendió de militancia.
¡Aleluya!
Hoy, viernes (25.05.2018), Pedro Sánchez, secretario
general del Partido Socialista, ha presentado una moción de censura contra
Mariano Rajoy, después de conocerse la sentencia del tribunal de la Audiencia
Nacional, que condena al Partido Popular por la demostrada existencia de la
llamada «caja B» (contabilidad extracontable, como la denominó Luis Bárcenas)
en la que figuraba la financiación ilegal del PP.
Considero, sin embargo, que Pedro Sánchez se ha
precipitado. Tal vez tendría que haber meditado algo más esta decisión. Aunque,
no nos engañemos, a él —como a la mayoría de los políticos— únicamente le mueve
una desmesurada ambición de poder. Y eso puede volverse en su contra. A partir
de ahora, se abre un nuevo tiempo de incertidumbre.
Otra cuestión que quiero comentarte, es el nuevo
desafío al Gobierno de Mariano Rajoy por parte del flamante presidente de la Generalitat de
Cataluña, Quim Torra, en una clara estrategia orientada a aumentar la tensión
política. Como ejemplo, en el nuevo Gobierno catalán, dos consejeros: el de
Presidencia, Jordi Turull Negre, y el de Territorio y Sostenibilidad, Josep
Rull Andreu, están presos en la cárcel de Extremera. Y otros dos consejeros: el
de Salud, Toni Comín Oliveres, y el de Cultura, Lluís Puig Gordi, se encuentran
en Bruselas huidos de la
Justicia. Todo un alarde de provocación. Teniendo en cuenta,
además, que el expresidente, Carles Puigdemont, que, según parece, continúa
teniendo la «batuta» que dirige esta desafinada «orquesta» —al principio desde
Bruselas y ahora desde Alemania—, también está huido de la Justicia. Todo un
alarde de provocación que, sin duda, acarreará consecuencias.
Un fuerte abrazo.
Robert
18 junio 2018
Amigo
imaginario:
¡Ya tenemos nuevo Gobierno! Pedro Sánchez es el
flamante presidente del Gobierno de España. El Partido Socialista vuelve a
estar en el poder.
El pasado día 7 de este mes, los miembros del nuevo
Ejecutivo prometieron sus cargos ante el rey. Y estos son sus nombres y
ministerios:
-Carmen Calvo: Vicepresidenta
e Igualdad.
-Josep Borrell: Exteriores,
UE y Cooperación.
-Margarita Robles: Defensa.
-Dolores Delgado: Justicia.
-FernandoGrande-Marlaska: Interior.
-María Jesús Montero: Hacienda.
-Nadia Calviño: Economía y
Empresa.
-Reyes Maroto: Industria,
Comercio y Turismo.
-Teresa Ribera: Transición
Ecológica.
-Pedro Duque: Ciencia,
Innovación y Universidades.
-Magdalena Valerio: Trabajo,
Migraciones y Seg. Social.
-Isabel Celaá: Educación,
FP y Portavoz.
-José Luis Ábalos: Fomento.
-Carmen Montón: Sanidad,
Consumo y Bienestar Social.
-Meritxell Batet: Política
Territorial y Función Pública.
-Luis Planas: Agricultura,
Pesca y Alimentación.
-José Guirao*: Cultura y
Deporte.
(*) Sustituyó a Maxim Huerta, que presentó su
dimisión seis días después de prometer el cargo (13.06.2018), por haber
defraudado a Hacienda 218.322 euros (entre 2006 y 2008). Es cierto, no
obstante, que en su momento regularizó su situación haciendo frente a la multa
correspondiente.
Bueno, querido amigo. Confiemos en que prevalezca
el interés general sobre el interés partidista, y que este nuevo Ejecutivo, en
cuyas filas cuenta con profesionales muy cualificados y con una larga
experiencia en diversos ámbitos,
demuestre su capacidad de gestión y proceda con la valentía, diligencia y
honestidad que los ciudadanos esperamos, demandamos y merecemos.
Como no sólo de política se compone la actualidad,
ni la vida —faltaría más—, hay otra cuestión, en este caso futbolística, que no
quiero dejar de comentarte.
El presidente de la Federación Española de Fútbol,
Luis Rubiales, ha cesado al seleccionador nacional, Julen Lopetegui, a tres
días del comienzo del Mundial de Fútbol: Rusia 2018. El motivo: haber fichado
como entrenador del Real Madrid, en pleno campeonato del mundo, sin haber
informado al presidente de la Federación con el que, recientemente, había
renovado el contrato por dos años más.
No se trata, en modo alguno, de que Lopetegui no
pueda fichar como entrenador de cualquier club, siempre que ese club, o él
mismo, afronte la correspondiente cláusula de rescisión. Pero en la decisión
del cese fulminante ha pesado más la forma que el fondo: no haber informado al
presidente de la Federación —ni Lopetegui ni Florentino Pérez— el interés del
Real Madrid por contratar al seleccionador como entrenador del club blanco. Es
decir, una «puñalada trapera» en toda regla.
Lo más denigrante de este asunto es que al
presidente del club blanco le faltó tiempo para proclamarlo urbi et orbi. Y es que, no nos
engañemos, el poder que se arroga el presidente del Real Madrid es
infinitamente mayor que el que pueda tener el presidente del Gobierno. Y se
cree que tiene patente de corso. De manera que hace y deshace a su antojo
—arrasando todo lo que encuentra a su paso, como un elefante en una
cacharrería—, sin que nadie se atreva a pararle los pies. Es el nauseabundo
poder del dinero.
De manera que, para seguir teniendo protagonismo,
hizo coincidir la presentación del nuevo entrenador, en Madrid, con la
conferencia de prensa de Fernando Hierro, en Rusia, al haberse hecho cargo de
la Selección. Quedando patente, una vez más, el egocentrismo que caracteriza al
presidente del Real Madrid.
Desde la dictadura, que duró cuarenta largos años,
el Real Madrid siempre se ha considerado el club de fútbol que representa a
España. Pero hay que decirlo alto y claro: el Real Madrid sólo se representa a
sí mismo. Desprecia la Liga y la Copa del Rey, y desestabiliza a clubes rivales
fichando a sus jugadores más emblemáticos —los cuales rara vez llegan a jugar
en el equipo blanco—, que acaban cedidos a equipos de menor entidad. Asimismo,
si un jugador de cierta relevancia se compromete con algún otro club importante
— como pueden ser el Atlético de Madrid o el Fútbol Club Barcelona, por poner
sólo dos ejemplos—, el Real Madrid siempre está al acecho para ofrecer unas
tentadoras condiciones económicas que ningún otro club se puede permitir. La cuestión es impedir que otro equipo tenga
la oportunidad de fichar a ese jugador. Y la Federación Española mirando hacia
otro lado.
Finalmente, porque, como tú sabes, no hay dos sin
tres, te comunico que hoy, seis años después de ser imputado en el caso Nóos,
Iñaki Urdangarin —esposo de la infanta Cristina de Borbón—, ingresó en la
prisión de Brieva (Ávila), condenado por el Tribunal Supremo a cinco años y
diez meses de cárcel.
Un fortísimo abrazo.
Robert
28 junio 2018
Amigo
imaginario:
Tras la moción de censura de Pedro Sánchez, que
supuso su nombramiento como presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy
renunció a continuar presidiendo el Partido Popular. Del mismo modo, también
renunció a su escaño en el Congreso, y dejará de estar aforado. Asimismo,
renunció a todos los privilegios, incluidos los económicos, inherentes a su
estatus como expresidente del Gobierno de España. Y esto, naturalmente, le
honra. Además, contrariamente a lo que han hecho algunos de sus predecesores,
tampoco será miembro del Consejo de Estado.
Por supuesto, no habrá para él «puertas
giratorias». Mariano Rajoy Brey, solicitó su reingreso en el Cuerpo de
Registradores de la Propiedad, cuya plaza conserva en Santa Pola (Alicante).
En el último año de carrera —es licenciado en
Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela—, comenzó a preparar las
oposiciones a registrador de la propiedad. Con 24 años, se convirtió en el
registrador más joven de España, y estuvo destinado en Padrón (A Coruña),
Villafranca del Bierzo (León) y Santa Pola (Alicante), destino, este último,
del que aún es titular.
Tú sabes, querido amigo, que siempre fui muy
crítico con Mariano Rajoy. Muchas de mis cartas y artículos dan testimonio de
ello. He censurado su «dontancredismo», su inmovilismo esperando que las cosas
se resolvieran por sí mismas. Su prepotencia y, ocasionalmente, también su
arrogancia. He de decir, no obstante, que, aunque en muy contadas ocasiones,
estuve de acuerdo con algunas de sus decisiones políticas. Sin embargo, siempre
he manifestado, por activa y por pasiva, mi absoluta discrepancia. Ahora bien —como lo cortés no quita lo valiente—, reconozco que ha
asumido la derrota con absoluta elegancia. A las 24 horas de haber cesado como
presidente del Gobierno, abandonó La Moncloa con exquisita naturalidad y
discreción. Y por ello, sinceramente, merece todo mi reconocimiento.
Ahora, como no podía ser de otra forma, a Pedro
Sánchez hemos de concederle el beneficio de la duda. Hemos de conferirle el
suficiente margen de maniobra que le permita iniciar su andadura sin
coacciones. Porque, recurriendo a las sabias palabras de Winston Churchill: «La
alternancia fecunda el suelo de la democracia». Esperemos, por el bien de
todos, que esa máxima se cumpla. No obstante, estimado amigo, es necesario que
permanezcamos vigilantes.
Un fuerte abrazo.
Robert
03 agosto 2018
Amigo
imaginario:
En el Partido popular, por primera vez en su
historia, en un proceso de elecciones primarias, sus afiliados eligieron al
nuevo presidente del partido tras la retirada de Mariano Rajoy. Lo hicieron en
un Congreso Extraordinario que tuvo lugar los días 20 y 21 de julio pasado.
Estos fueron los candidatos:
María Dolores de Cospedal: secretaria general del Partido Popular y
presidenta del PP de Castilla-La Mancha. Entre 2011 y 2015 fue presidenta de la
Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Entre 2016 y 2018 fue ministra de
Defensa de España.
Soraya Sáenz de Santamaría: entre 2011 y 2018 fue vicepresidenta y ministra
de la Presidencia del Gobierno de Mariano Rajoy. Ha sido portavoz del Gobierno,
entre 2011 y 2016 , y desde 2016 hasta 2018 , se agregó al Ministerio de la
Presidencia, con la cartera de Administraciones Territoriales.
Pablo Casado: diputado en las Cortes Generales por Ávila y vicesecretario general
de Comunicación del Partido Popular.
José Manuel García Margallo: fue ministro de Asuntos Exteriores y de
Cooperación del Gobierno de España desde3 del 22 de diciembre de 2011 hasta el
4 de noviembre de 2016 (desde el 20 de diciembre de 2015 fue en calidad de
ministro en funciones).
José Ramón García Hernández: diputado por Ávila en el Congreso durante tres
legislaturas.
José Luis Bayo: fue presidente de Nuevas Generaciones de la organización valenciana
del PP durante la pasada década y dimitió en marzo de 2008 por «motivos
personales y laborales».
Contra todo pronóstico, el elegido para comandar el
PP fue Pablo Casado. Por su parte, la que, en principio, se sentía ganadora,
Soraya Sáenz de Santamaría, fue la gran derrotada. Ahora, como es natural,
estaremos atentos a la línea de
actuación del nuevo presidente de la formación conservadora. Luego, tiempo
tendremos para aprobar o cuestionar la gestión y, sobre todo, el talante del
nuevo líder de la oposición.
Cambiando de asunto, querido amigo, el pasado día
24 de julio se conmemoró el quinto aniversario del accidente ferroviario en
Angrois (Santiago de Compostela) —sobre el que te escribí ampliamente en mi
carta del 3 de agosto de 2013—, en el que hubo 81 víctimas mortales y 147
heridos. El tiempo pasa muy deprisa. Sin embargo, cinco años después, cuando
aún no se han apagado los lamentos de las víctimas, todo sigue igual: continúa
sin instalarse el sistema de seguridad ERMTS en ese tramo del trazado
ferroviario.
Los
accidentes ocurren, qué duda cabe, porque el riesgo cero no existe. Pero los
políticos, en su afán por dejar su impronta y arrogarse un mérito que les
proporcione votos, han institucionalizado las inauguraciones exprés, aunque las
obras no estén concluidas ni dispongan de las preceptivas medidas de seguridad.
Pero había que señalar un culpable. Buscar un «cabeza de turco». Y toda la
responsabilidad recayó en el maquinista. Y aquí paz y después gloria.
Se pusieron
todas las trabas para impedir la creación de una Comisión de Investigación
objetiva e independiente. Nos han mentido descaradamente, manipulando las
informaciones, tratando de justificar lo injustificable. No hubo ceses ni
dimisiones. Nadie quiso asumir su cuota de responsabilidad. Es desgarrador
—además de muy ilustrativo— un vÍdeo subido a YouTube (Comparecencia víctima
del accidente ferroviario Santiago en Comisión de Investigación del Congreso),
en el que la madre de una de las víctimas va desgranando, con meticulosidad
narrativa, todo lo acontecido tras el trágico accidente, y las barreras que han
tenido que superar hasta llegar a la Comisión Europea, en Bruselas, que
desmontó todas las mentiras argumentadas
por Adif y Renfe, entre otros.
En consecuencia, querido amigo, se confirma, una
vez más, el apotegma de John F. Kennedy: «El éxito tiene muchos padres, pero el
fracaso es huérfano».
Un fuerte abrazo.
Robert
Robert
Robert
Amigo imaginario:
El escenario político en Andalucía, en un esfuerzo desesperado por llegar a formar gobierno, está en la negociación. El Partido Socialista, por un lado; y Partido Popular, por el otro, buscan los apoyos necesarios que les permita tener una mayoría suficiente.
Ni uno ni otro lo van a tener fácil. Hay mucho en juego. Y las negociaciones, con sus más y sus menos, me temo que irán para largo. Teniendo en cuenta, además, que las Navidades ya están aquí. Por lo que, sin ninguna duda, tendremos que esperar al próximo año.
En lo referente al segundo asunto de mi carta anterior —el partido de fútbol Boca Juniors-River Plate—, he de reconocer que, afortunadamente, mis temores eran infundados. No hubo incidentes destacables. Ahora bien, las preguntas que formulaba continúan vigentes. Espero que algún día obtengamos respuestas concluyentes.
Finalmente, querido amigo, tengo que despedirme con una muy mala noticia: otra mujer, una joven profesora de 26 años, Laura Luelmo, ha sido brutalmente asesinada en El Campillo ( Huelva).
Natural de Zamora, Laura llevaba pocos días en aquella localidad onubense como profesora interina. Y hoy, la edición digital de La Voz de Galicia publica lo siguiente: «La autopsia practicada al cadáver de Laura Luelmo revela que la profesora zamorana fue agredida sexualmente y confirma que murió a causa de un golpe en la frente entre el 14 y el 15, dos o tres días después de su desaparición. El principal sospechoso del crimen, Bernardo Montoya, ha confesado ante la Guardia Civil haber matado a la joven y ha reconocido la motivación sexual. Según su versión, trató de violarla, pero no lo consiguió. Después metió a Luelmo en el coche y la dejó en el lugar donde el lunes apareció su cadáver, según contó a los agentes».
El citado autor confeso del asesinato tiene un largo historial delictivo: estuvo 17 años en la cárcel por matar a una octogenaria a machetazos para que no declarara contra él por un robo. Durante un permiso penitenciario, intentó agredir sexualmente a una joven, y fue condenado a otro año. Al salir, otro robo con violencia lo llevó de nuevo a prisión con una condena de dos años, que terminó de cumplir el pasado mes de octubre.
Como puedes ver, amigo imaginario, la violencia machista —mal llamada violencia de género— se ha convertido en una lacra social que coarta la libertad a la que toda mujer tiene derecho como ciudadana. Y si no se adoptan medidas contundentes —por ejemplo, no conceder permisos penitenciarios por «buen comportamiento», a los depredadores sexuales y asesinos, porque siempre reinciden—, nuestro ámbito de convivencia se convertirá en una selva. O lo que es peor, regresaremos a las cavernas. Y aunque presumamos de pertenecer al primer mundo y de ser el non plus ultra de la civilización, es incuestionable que habremos fracasado como sociedad.
Paciente amigo, te deseo unas muy Felices Navidades y Año Nuevo. Te recomiendo, sin embargo, moderación en las celebraciones gastronómicas. Procura no excederte con el cava y las bebidas espirituosas, porque uno siempre suele acabar perdiendo la compostura, haciendo y diciendo muchas tonterías. Hasta el próximo año.
Un fortísimo abrazo.
31 octubre 2018
Amigo
imaginario:
Sé que ha pasado mucho tiempo desde mi última
carta. Circunstancias familiares adversas me han impedido escribirte antes.
Espero que sepas disculparme.
En este país, como en tantos otros de nuestro
entorno, la cuestión política anda bastante revuelta. Las distintas formaciones
políticas continúan desacreditándose entre sí. Los insultos y las
descalificaciones, claramente oportunistas, están a la orden del día. No importa el ámbito en el que se profieran.
Sólo persiguen ser el centro de atención y salir en los medios. Todo lo demás —como puede ser, por ejemplo, aunar esfuerzos por una causa común, defendiendo
los intereses de la ciudadanía para mejorar sus condiciones de vida—, querido
amigo, les importa un rábano. La cuestión es seguir estando de actualidad —en
el «candelero»—, decir lo que algunos quieren oír, y recibir sonoras ovaciones
de sus correligionarios.
En mis últimas «Cartas al Director», que envié a
tres periódicos, denunciaba la falta de entendimiento entre administraciones
públicas —alcaldías, Autoridad Portuaria, Diputación Provincial— cuando sus
titulares representan a partidos políticos antagónicos. Por ello, en una de
esas «cartas», me tomé la libertad de referir una cita del político y
periodista francés, Georges Clemenceau, que dice: «Gobernar dentro de un
régimen democrático sería mucho más fácil si no hubiera que ganar
constantemente elecciones». Y ahí está el quid de la cuestión.
En una de las «cartas» (fecha, 15 de este mes de
octubre), el último párrafo decía: «Como ciudadano de a pie, este somero
análisis me lleva a la siguiente conclusión: cuando los intereses partidistas
están por encima de los intereses de la ciudadanía, y los actores no se
esfuerzan para lograr invertir esa tendencia, considero llegado el momento de
que abandonen la política y se dediquen a otras actividades que no requieran
diplomacia, espíritu de equipo y buena educación». Sin embargo, inicialmente,
este párrafo finalizaba así: «...considero llegado el momento de que abandonen
la política, se vayan a sus casas, y dediquen su tiempo libre a pasear por el
parque dando de comer a las palomas». Pero, en el último momento, cuando iba a
hacer «clic» para enviarlo, me pareció una falta de respeto..., y lo modifiqué.
Cambiando de asunto —porque la política no debe
ocupar más lugar que el estrictamente necesario—, en mi carta del 18 de junio
te comentaba que el presidente del Real Madrid, se supone que con una oferta
muy «suculenta», había contratado a Julen Lopetegui —que en aquel momento era
seleccionador nacional, al que le habían renovado el contrato por dos años más
(hasta la fase final de la Eurocopa 2020). ¡El chollo de su vida!— como nuevo
entrenador del equipo blanco. Pero, el día 29 de este mes de octubre, tras diez
jornadas de Liga y el Real Madrid en el noveno puesto de la clasificación,
Lopetegui ha sido cesado.
Consecuentemente, Julen Lopetegui, en el mes de
junio de este año, era cesado como seleccionador nacional; y en octubre, como
te dije antes, también fue cesado como entrenador del Real Madrid. Y ahora, de
momento, el entrenador vasco está en tierra de nadie. Lo que viene a confirmar,
una vez más, el refrán: «La avaricia rompe el saco».
Un fuerte abrazo.
06 diciembre 2018
Amigo imaginario:
Lo lamento,
sinceramente, pero tengo que volver al asunto político. No puedo evitarlo. Pero
quiero que comprendas que no se trata de una cuestión personal, en modo alguno.
Es la actualidad, amigo mío, la que —erre que erre— me obliga a comentarte lo
acontecido en los últimos días.
El pasado domingo
(02.12.2018), se celebraron las elecciones autonómicas en Andalucía. Y el
resultado, para sorpresa de propios y extraños, ha dejado sin palabras a más de
uno:
Partido
|
Escaños
|
Votos
|
% votos
|
Partido
Socialista
|
33
|
1.009.243
|
27,95
|
Partido
Popular
|
26
|
749.275
|
20,75
|
Ciudadanos
|
21
|
659.631
|
18,27
|
Adelante
Andalucía
|
17
|
584.040
|
16,18
|
Vox
|
12
|
395.978
|
10,97
|
Como puedes ver, el
Partido Socialista, a pesar de ser la fuerza más votada, queda en clara minoría
si se llevan a cabo las posibles y razonables coaliciones para formar gobierno,
teniendo en cuenta que son necesarios 55 escaños para tener mayoría.
Habrás observado que
una nueva formación ha irrumpido en el panorama político patrio. Se denomina Vox, y está considerada de ideología
derecha radical. Y eso es muy preocupante.
Es muy probable, según
especulan los analistas políticos, que lleguen a un acuerdo para formar
gobierno: Partido Popular, Ciudadanos y Vox, que sumarían 59 escaños (cuatro
más de los necesarios para tener mayoría). La incertidumbre está servida.
Hoy, amigo mío —¡cómo
pasa el tiempo!—, nuestra Constitución cumple 40 años (tenía yo 35 jóvenes
años). La Carta Magna más longeva de la historia de nuestro país, cuestionada
por la ultraderecha y los independentistas catalanes. Como ejemplo —según
publica hoy La Voz de Galicia—, Adriá Carrasco, miembro de los CDR (Comités de
Defensa de la República) huido en Bélgica, interrumpió ayer un discurso del
ministro Borrell en Bruselas con motivo del aniversario de la Constitución,
gritando que la Carta Magna es «una puta farsa». Intolerable.
Ha transcurrido mucho
tiempo, qué duda cabe, desde aquel 6 de diciembre de 1978. Por ello, tal vez
nuestra Carta Magna necesite un «chequeo» para comprobar su estado de «salud».
Y, según el «diagnóstico», aplicar el «tratamiento» correspondiente para
adaptarla a las circunstancias y necesidades actuales.
Finalmente, querido amigo, el próximo domingo
(09.12.2018) un acontecimiento futbolístico tendrá como escenario el Estadio
Santiago Bernabéu. No se trata de un partido cualquiera. Se enfrentan los
equipos argentinos Boca Juniors y River Plate, que disputan la final de la Copa
Libertadores.
El partido en cuestión,
que tenía que jugarse en Argentina, como corresponde, tuvo que suspenderse en
dos ocasiones por enfrentamientos —comportamientos vandálicos— entre los ultras
de ambos equipos, que las fuerzas de seguridad argentinas no fueron capaces de
controlar.
Así las cosas, la
Conmebol decidió que ese partido se jugara fuera de Argentina. En un principio,
pensaron en un país de su entorno sudamericano. Sin embargo, ignoro por qué
extraña razón, se pusieron en contacto con el «todopoderoso» presidente del
Real Madrid, que aceptó.
Y yo, en mi ignorancia «futbolera»,
me pregunto ¿por qué España tiene que asumir el riesgo de posibles —o más que
probables— disturbios de los ultras argentinos? ¿Por qué tenemos que movilizar
cinco mil efectivos policiales para garantizar la seguridad en las calles de
Madrid y en el Estadio Santiago Bernabéu? ¿Por qué razón los derechos de esos
incómodos visitantes prevalecen sobre nuestros derechos ciudadanos, teniendo
que cerrar al tráfico algunas calles? ¿Cuánto nos va a costar ese despliegue de
efectivos para protegernos de esos energúmenos? ¿Quién —o quiénes— se beneficia
de ese evento deportivo que nos es totalmente ajeno? ¿Qué oscuros intereses se
ocultan bajo esa fachada futbolística? No estoy capacitado para responder a
estas preguntas que yo mismo me hago.
Paciente amigo, en mi
próxima comunicación epistolar te pondré al corriente de los acontecimientos derivados
del panorama político andaluz y de la contienda futbolística argentina en
nuestro país.
Un fuerte abrazo.
19 diciembre 2018
Amigo imaginario:
El escenario político en Andalucía, en un esfuerzo desesperado por llegar a formar gobierno, está en la negociación. El Partido Socialista, por un lado; y Partido Popular, por el otro, buscan los apoyos necesarios que les permita tener una mayoría suficiente.
Ni uno ni otro lo van a tener fácil. Hay mucho en juego. Y las negociaciones, con sus más y sus menos, me temo que irán para largo. Teniendo en cuenta, además, que las Navidades ya están aquí. Por lo que, sin ninguna duda, tendremos que esperar al próximo año.
En lo referente al segundo asunto de mi carta anterior —el partido de fútbol Boca Juniors-River Plate—, he de reconocer que, afortunadamente, mis temores eran infundados. No hubo incidentes destacables. Ahora bien, las preguntas que formulaba continúan vigentes. Espero que algún día obtengamos respuestas concluyentes.
Finalmente, querido amigo, tengo que despedirme con una muy mala noticia: otra mujer, una joven profesora de 26 años, Laura Luelmo, ha sido brutalmente asesinada en El Campillo ( Huelva).
Natural de Zamora, Laura llevaba pocos días en aquella localidad onubense como profesora interina. Y hoy, la edición digital de La Voz de Galicia publica lo siguiente: «La autopsia practicada al cadáver de Laura Luelmo revela que la profesora zamorana fue agredida sexualmente y confirma que murió a causa de un golpe en la frente entre el 14 y el 15, dos o tres días después de su desaparición. El principal sospechoso del crimen, Bernardo Montoya, ha confesado ante la Guardia Civil haber matado a la joven y ha reconocido la motivación sexual. Según su versión, trató de violarla, pero no lo consiguió. Después metió a Luelmo en el coche y la dejó en el lugar donde el lunes apareció su cadáver, según contó a los agentes».
El citado autor confeso del asesinato tiene un largo historial delictivo: estuvo 17 años en la cárcel por matar a una octogenaria a machetazos para que no declarara contra él por un robo. Durante un permiso penitenciario, intentó agredir sexualmente a una joven, y fue condenado a otro año. Al salir, otro robo con violencia lo llevó de nuevo a prisión con una condena de dos años, que terminó de cumplir el pasado mes de octubre.
Como puedes ver, amigo imaginario, la violencia machista —mal llamada violencia de género— se ha convertido en una lacra social que coarta la libertad a la que toda mujer tiene derecho como ciudadana. Y si no se adoptan medidas contundentes —por ejemplo, no conceder permisos penitenciarios por «buen comportamiento», a los depredadores sexuales y asesinos, porque siempre reinciden—, nuestro ámbito de convivencia se convertirá en una selva. O lo que es peor, regresaremos a las cavernas. Y aunque presumamos de pertenecer al primer mundo y de ser el non plus ultra de la civilización, es incuestionable que habremos fracasado como sociedad.
Paciente amigo, te deseo unas muy Felices Navidades y Año Nuevo. Te recomiendo, sin embargo, moderación en las celebraciones gastronómicas. Procura no excederte con el cava y las bebidas espirituosas, porque uno siempre suele acabar perdiendo la compostura, haciendo y diciendo muchas tonterías. Hasta el próximo año.
Un fortísimo abrazo.
Robert
Un fuerte abrazo
ResponderEliminarGracias, Marité. Otro abrazo fuerte para ti.
EliminarNunca imaginé que podría escribirse a un amigo imaginario. Cuando leí tus escritos me gustó la idea. Estos días encontré unos papeles y "yo también le escrbí a un amigo imaginario " era a mi marido...le contaba cosas como cuando éramos novios. Unos cuantos papeles y me acordé de tu amigo imaginario...Un abrazo muy fuerte
ResponderEliminarLa idea de mis 'Cartas a un amigo imaginario' surgió, sin más. Puede parecer una extravagancia, sin duda. Pero la única pretensión era contar los acontecimientos, a modo de crónica, opinando sobre los mismos, y no se me ocurrió nada mejor que plasmarlo en unas cartas. Ya conoces el dicho: cada loco con su tema. Un fortísimo abrazo, Marité.
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